Fue cuestión de liberarse del miedo, de aproximarse al fantasma, de medirse en las carreras, de compararse en estatura. Fue un proceso que necesitó tiempo. Primero fue necesario entender que no había tanta diferencia y a continuación comprender que no había ninguna. El complejo, evidente al inicio, desapareció al final del partido. El Real Madrid venció en el Camp Nou porque no sólo metió más goles, sino que metió más miedo. Cualquier cosa es posible a partir de ahora. Que los guapos lo parezcan menos y que los ogros comiencen a resultar terriblemente atractivos.

Lo más hermoso del fútbol es su capacidad para cambiar el guión y, en consecuencia, para destrozar las crónicas medio escritas (este deporte no soporta que lo prevean y es posible que tampoco soporte a los cronistas). El primer análisis, elaborado en el descanso, analizaba las excesivas precauciones del Real Madrid, al menos de inicio. Al primer golpe de vista quedó claro que para Zidane el orden era más importante que el juego y la pizarra más relevante que el balón. Es obvio que sentía algo muy parecido al miedo.

En esa actitud defensiva, admisible en la ida de unas semifinales (todo llegará), había un reconocimiento de inferioridad que el Real Madrid no puede permitirse en ningún caso, ni siquiera en el Camp Nou. Y menos aún con diez puntos de desventaja.

El plan de arranque dio confianza al Barça, pero le obligó a pensar. Para Messi pudo significar incluso un estímulo. Nada interesa tanto a un genio como un acertijo. Decía Cruyff, muy generoso en este juicio, que todo el mundo sabe jugar al fútbol con espacios. Como casi siempre tenía razón.

A pesar de su interés, Messi no tuvo éxito: lo intentó como delantero entre líneas hasta que confirmó que Casemiro no tiene cosquillas, probablemente carezca incluso de axilas. Después probó como centrocampista y también alternó en la banda izquierda. Además, reclamó un penalti que estuvo muy cerca, pero le faltó un palmo. Apuesto a que todavía busca fórmulas para ganar la partida.

Durante muchos minutos, el Barcelona estuvo más cerca de la victoria sin necesidad de marcar un gol. El simple hecho de dominar el juego sin oposición le concedía una autoridad moral sobre el Clásico. Sin embargo, las pocas veces que el Madrid se desplegó en ataque generó en el ambiente algo muy parecido, sí, al miedo: frío repentino sin que baje la temperatura. No había diferencias de talento cuando el visitante replicaba. No tenía sentido alguno verse inferior.

La fortuna del Madrid es que los jugadores tienen problemas para retener las normas (las de circulación en mayor medida). El equipo que salió en la segunda mitad fue más anárquico y valeroso, mucho más fiel a sí mismo, a sus condiciones naturales. Ni siquiera el gol de Piqué le afectó al ánimo. Benzema lo igualó muy pronto y a partir de entonces el choque cambió por completo, con la presunta víctima lanzada a por el teórico verdugo. El miedo cambió de bando y esa imagen vale más que un triunfo. Cristiano consiguió el gol de la victoria, aunque también pudo lograrlo Bale; si disculpamos al línea es porque debe ser una tortura llevar una bandera y no ondearla de vez en cuando.

Se equivocaron los que daban la historia de esta temporada por escrita, porque esta historia hay que empezar a escribirla a partir de abril. No digo que todo vaya a ser distinto. Sólo insisto en la irritación que le produce al fútbol que le marquen el camino. Vida nueva. Piensen en las posibilidades que esto tiene.

Picas apócrifas

Bravo (1); Alves (-), Piqué (2), Mascherano (1), Alba (1); Rakitic (1) [Turan, (-)], Busquets (2), Iniesta (1); Messi (2), Suárez (1) y Neymar (1).

Keylor Navas (2); Carvajal (1), Pepe (2), Ramos (1), Marcelo (2); Kroos (1), Casemiro (2), Modric (2); Bale (2) [Lucas Vázquez (1)], Benzema (2) [Jesé (1)] y Cristiano (2).

 

 

50 comentarios en «El Real Madrid venció al miedo»
  1. ¡¡¡Qué alegría de poder volver a leer una crónica del gran Juanma Trueba!!! Enhorabuena por la iniciativa. Suma un lector más. Un saludo.

  2. La personalidad es un factor importante a la hora de afrontar el miedo. En sí el miedo no es algo negativo ya que es el mecanismo por el cual el cuerpo se mantiene en alerta. La personalidad de Zidane ha sido el factor que ha dado una confianza que antes a los jugadores les faltaba.

    El Barcelona tiene un guion sin casi fisuras. Posesión, velocidad en el último tercio y presión arriba. Asi se sintió el Madrid. Lograba robar pero no salir. El balón llegaba a los delanteros que se preguntaban antes de perderla : ¿y ahora qué?

    Cuando el rival logra hacer contras fluidas (el no-gol de Bale con Modric tirando paredes y Marcelo cabalgando en campo abierto quedará como historia de los Clásicos) y logra poco a poco armarse con el balón ese guión se resquebraja. Los laterales sufren muchísimo a la espalda y los centrales tienen que llegar a esa zona donde no se sienten cómodos. Valga de ejemplo el sí-gol: un balón a la espalda de Jordi Alba es rematado en el segundo palo de Dani Alves.

    Como siempre se hablará de cambio de ciclo. Pero al menos el Madrid tiene algo a lo que agarrarse: empieza a saber jugar a estos partidos. No se puede ganar una Liga regalando 12 puntos por no saberle jugar a tus rivales directos. Una pequeña victoria dentro de este clima de triunfalismo que seguro que se va a crear y que tan maneja el Madrid.

  3. Es un placer volver a leerle. Seguiremos aprendiendo de sus crónicas. Coincido con su visión. Considero que el partido se precipitó a lo insustancial por la realidad de ambos equipos: el Barça era paciente porque la autoridad clasificatoria no le exigía más (y además era una coartada tras las fechas FIFA y antes de la eliminatoria Champions) y el Madrid era pasivo para evitar sobreexponerse. Los blancos fueron más temerosos que reivindicativos, más que aumentar la autoestima intentaron no perder la que les quedaba. Costó mucho ver alguna acción que rompiera ese escenario, y al final se produjo con el 1-1. Fue un corte de digestión para los azulgranas. El Barça se cansó y ya no tenía los pulmones de Rakitic y se desordenó sin poder confiar en un Arda descolocado. Equipo partido y vulnerable. Y ahí surgió, para mí, el gran mérito del Madrid: vio la oportunidad, fue a por ella y la supo aprovechar. El resultado deja impactos anímicos contrarios, pero mirando más allá de vencedores y vencidos creo que fue un Clásico de equipos irregulares e imperfectos. Un partido empequeñecido (¿acomplejado?) por la solemnidad que le presidía, la emoción contagiosa del recuerdo de Johan.

    Un saludo, Juanma.

  4. Juanma, me alegro mucho de leerte. Espero que un día puedas explicar como un genio como tú es despedido del AS. Mira que a mi me gusta las historias del abuelo Relaño pero quizás empieza a chochear …
    Saludos desde Tarragona.

  5. Mi impresión fue diferente. Creo que sobrevaloras este partido.
    El Barcelona salió con una misión prioritaria que era el mínimo desgaste físico de cara a la, a priori, dura eliminatoria de Champions que tendrá en las próximas dos semanas.
    El Madrid salió a no recibir una goleada como en la primera vuelta.
    Los locales con el cómodo colchón en Liga de 9 y 10 puntos a falta de 8 jornadas se lo podían permitir. Jugaron a ganar el partido jugando andando y aunque estuvieron por delante en el marcador, no les llegó.
    La primera parte fue bastante tediosa. Un Barcelona muy lento no conseguía imponerse con el balón a un Madrid que se lo cedió descaradamente con la única salida de la velocidad de Bale a la contra. Mención especial para Ramos empeñado en forzar una expulsión que «justificara» la presumible derrota.
    La segunda parte se inició con el gol a balón parado del Barcelona. Era imposible que llegará en jugada dada la desgana y apatía que mostraba el ataque blaugrana.
    Ante el gol rival y viendo la actitud local, el Madrid se estira y con algo de fortuna consigue empatar el encuentro. Con 1-1 el Barsa no cambia la velocidad. El objetivo azulgrana es claro: Mínimo desgaste. El Madrid consigue el 1-2 injustamente anulado, Ramos consigue al enesimo intento su objetivo de la expulsión y finalmente llega el 1-2 al marcador, con la actuación cómica en defensa de Dani Alves en la jugada.
    Ni con el 1-2 el Barcelona altera su plan. El riesgo de una lesión o adversidad de cara al compromiso del martes debe ser mínimo.
    Fin de partido. 1-2. El Barcelona quiso ganar andando ante jugadores de 100 millones de euros y no le llegó (por desgracia para La Liga, le suele llegar contra el 80% de rivales de la misma)
    No creo que el partido de para lecturas que vayan mucho más lejos. El Barsa no descubrió hoy que los tres delanteros del Madrid marcan goles, simplemente prefirió perder sin desgaste a intentar ganar desgastandose. Ni el Madrid descubrió hoy que el potencial de su plantilla le permite hacer frente al Barcelona.

    PDA: Curioso que más de la mitad del once local tuviera que cruzar el charco en el parón por selecciones y sólo el portero del visitante lo hiciera.

  6. A la 1:53 de la madrugada es un gustazo leerte de manera reposada. Has sido, eres y serás un maestro para mí. Cada crónica era, es y será una lección. Guiño, guiño.

  7. Muchas gracias Juanma, por dejarnos disfrutar de nuevo con tus crónicas. Un saludo y gracias por dejarme crecer con ellas (mis hijos seguro q sabrán valorarte tanto como yo)

  8. Es un placer leerte de nuevo. Con más libertad, si cabe.
    Lo de las picas ya es para quitarse el sombrero.
    Ahora solo queda tu participación en el podcast de @cuatropicas y hacerles cambiar su famosa entradilla «Juego a Comunio y odio a Juanma Trueba» jajaja

  9. Vuelvo de fiesta (doble fiesta esta noche) y me meto, antes de dormir la mona, en internet, por mirar titulares, y pensando que hasta mañana no vería su crónica en este su nuevo sitio (perdóneme el atrevimiento, pero muy mejorable el diseño, espero que con el tiempo , y poco a poco, coja el estilo que su creador destila.. el contenido es más importante que el continente, y en este caso el contenido sé que va a ser sublime, como todo lo que escribe, pero esta suerte de blog de color salmonete y bastante básico no pega con lo ilustre del que lo suscribe..), asi que doble, triple alegría esta madrugada, la de poder leer ya mismo de nuevo una crónica suya.

    Muchas gracias por deleitarnos de nuevo con sus crónicas. Dentro de mi limitado conocimiento del periodismo deportivo patrio (normalmente prefiero una buena novela que el amarillismo que rodea al periodismo deportivo el 80% del tiempo) me parece que gente como usted o el señor Segurola son un nivel infinitamente superior a la mediocre media.

    ¡Gracias de nuevo, señor Trueba, y un saludo!

    Pd: Ok, vale, salvaremos el tema del diseño del blog gracias al detalle de «El Apartamento». Como sabe usted tocar la fibra sensible a los que ansiamos calidad en esta vida.

  10. Ha vuelto un maestro, como volvió el Madrid en el Camp Nou. Quizá porque los grandes (ora clubes, ora periodistas) nunca se marchan. ¡Enhorabuena!

  11. Muchas gracias por plasmar con palabras lo que nos parece ver en el campo, pero nunca acertaríamos a explicar o escribir. Soy uno de tus damnificados del comunio, pero nunca te hubiera perdonado que te dejaras apagar por algun sereno con aspiraciones de farero. Espero que tus crónicas no se limiten a los partidos «importantes», porque tenemos derecho a leerte más que de vez en cuando. Lo siento, pero es el peaje que hay que pagar por explicar el fútbol de la manera en que lo haces. Gracias por todo lo que te queda por contarnos.

  12. Como atlético no puedo estar de acuerdo con esta frase: «En esa actitud defensiva, admisible en la ida de unas semifinales (todo llegará)…».

    Como lector he disfrutado de volver a leer una crónica de las de Trueba, de las que me gustan.

    Le pongo tres picas (apócrifas)

  13. Excelsa crónica como siempre fue habitualmente…
    Merecida victoria blanca aunque echo de menos algún comentario sobre el empeño de Ramos en cumplir un ciclo completo de cinco amarillas en un solo partido… Al final lo consiguió…

  14. Es un verdadero privilegio poder leer a personas capaces de realizar una crónica de un partido de fútbol -y de otros asuntos deportivos- alejada de lugares comunes, adornada por un estilo propio, por un uso creativo del lenguaje, elegante… Un rato de lectura que realmente aporta algo más que adrenalina forofística -si me disculpa el modismo-.
    Quizá usted, señor Trueba, no tuviera realmente cabida en su anterior medio, quizá en medio deportivo alguno.
    Pero ha de saber que hay muchas personas que gozamos con sus crónicas y que estimamos el esfuerzo por convertirlas en algo diferente, un momento de reflexiva sensatez.
    Yo solo puedo hablar en mi nombre, y se lo agradezco sinceramente.

  15. Un placer volver a leerte, Juanma. Un privilegio tenerte en mi despacho. Coincido totalmente con Juan Carlos Padilla; no se trata de saber de fútbol (yo te conocí escribiendo de ciclismo), ni creo que tan siquiera se trate de ningún deporte en particular. se trata de una manera de observar y de escribir distinta, con mucha creatividad, de manera divertida, elegante, con estilo propio, con voz. Correré la voz en los corrillos de lectores que frecuento, y en los que hablamos de ti (no mucho, no te vayas a creer), para que sepan que estás aquí y que pueden seguir disfrutando leyendo lo que escribes, pero que no vengan a mi casa. Todo desde la suya. Una cita que me apasiona y utilizo a veces: «Siempre que surge un genio se le puede reconocer por esto: todos los necios se conjuran contra él».
    Apertas desde La Coruña.

    P.D.: Esta crónica se me ha hecho corta.

  16. Hola Juanma, no te acordarás de mi, fui alumno tuyo del Máster de Periodismo Deportivo de la UEM en el 2008/09. Desde entonces he de decirte que me he llevado una profunda decepción con el periodismo deportivo español, por no generalizar, diré que es principalmente el periodismo «futbolero» el que me parece que se ha convertido en algo incluso peor que la prensa rosa, importa más lo externo al terreno de juego que lo que pase durante los 90 minutos del partido.

    Te seguiré aquí en tu web, en donde espero que, liberado de lineas editoriales y fobias, puedas desarrollar tu principal virtud y por la que me parecías el mejor cronista de España, algo que en los últimos años habías perdido, al menos en mi opinión.

    Un abrazo.

  17. Sigues pensando que hay que vender a Cristiano? Mira que durante trece años he estado de acuerdo con tus opiniones al 99% pero decir que el Madrid debe desprenderse de su mejor jugador en los últimos 50 años me dejó ojiplático. Si el Madrid ha ganado poco durante los últimos años desde luego no ha sido por su sideral contribución. Él ha hecho su trabajo más que de sobra. Simplemente se ha encontrado enfrente con un pequeñajo extraterrestre que ha sido mejor. De los culés puedo esperármelo pero que sean los propios madridistas los que le pongan un pero al portugués es algo que me deja alucinado.

  18. Gracias por volver a escribir, Juanma Trueba, sobre cualquier tema, en cualquier espacio. Haces tuyo un mundo que no eres tú y lo devuelves para que podamos verlo de otra manera y sentirnos igual de confusos.

  19. Un saludo desde Colombia. De España le hago fuerza al Atlético, pero no me perdía ni una sola de sus crónicas sobre el Real. Era la única razón por la que leía As. Llevaba semanas preguntándome por qué no había vuelto a escribir. Usted es el más elegante y divertido de los cronistas de deportes que leo, y me alegra mucho encontrarlo de nuevo. ¡La mejor energía para usted desde América Latina!

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