
Pasen, vean y opinen. Si pueden
Se pongan como se pongan, no hay partido, sólo polémica. Lo lamentarán especialmente Cristiano, Morata, Keylor y el Alavés de la primera mitad. A partir de este momento, prescindiremos de lo ocurrido y congelaremos el encuentro en el minuto 15, cuando Deyverson despejó con el brazo o con la cabeza un lanzamiento directo de Bale. El árbitro vio penalti y las cámaras de televisión, a la espera de la película de Zapruder, no han podido aclararlo. Hay quien observa perfectamente el impacto en el antebrazo y hay quien distingue sin género de dudas el golpeo en el parietal. No faltan quienes analizan la violencia del rechace (rechazo según la romántica Fundéu) para concluir científicamente que fue mano o cabeza, penalti o robo.
Según pasen los días, y hasta que el próximo partido nos aplaque los ánimos, seguiremos escrutando la imagen, en busca del monstruo del Lago Ness y del segundo tirador en Dallas. No nos pondremos de acuerdo y hasta es probable que se abra otra vía de discusión, la que planteó el alavesista Alexis, nada más finalizar el encuentro, en los micrófonos de BeIn Sport: “Da igual. Lo que está claro es que en el área del Madrid no se hubiera pitado nada”.