
La tenia de Cristiano y la serpiente de El Principito.
Cuando el próximo 26 de mayo se dispute la final de la Champions, probablemente con presencia del Real Madrid (estimación estadística, no sentimental), el partido contra el APOEL nos parecerá de otro siglo. A excepción de los chipriotas y los asistentes al estadio (japoneses debutantes), nadie recordará el rival de la primera noche salvo que consulte las fuentes adecuadas. No le quiero restar importancia al encuentro, pero convendrán conmigo que hay partidos que sólo son memorables si se pierden. Y en este caso, la derrota era una improbable extravagancia por el simple motivo de que Cristiano tenía hambre y el APOEL carece de colmillos.
Me dirán ustedes que Cristiano siempre está hambriento, y es muy cierto: su tenia (o solitaria) es de la familia de las anacondas. Sin embargo, esta vez se le acumulaban las dedicatorias después de 28 días sin vestirse de blanco, y ya hemos dicho por aquí que nada estimula tanto a los futbolistas como cerrar bocas (a los periodistas, a los jueces, a Montoro).
Comentarios recientes
Enrique
"Es de preocupar la falta de alternativas de juego que ofrece el Madrid ..."
Cecil
"Artículo brillante y redondito. Juanma Trueba, señores. "
Khimera
"Pues te voy a llevar la contraria: Isco, sólamente tiene 4 letras. "
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"Gracias Juanma. Hoy en un día de tanto dolor y sensación de irrealidad, ..."
Luis Bolonio
"Gracias Juanma Trueba un día más por tu crónica, normalmente me parecen una ..."