Relatos de deporte, cine, política y de lo que sea menester

Mes: abril 2016 Página 1 de 3

Bale salva otro escollo

Después de acumular ocasiones durante los primeros minutos del partido, el Real Madrid sintió que la victoria era cuestión de tiempo. Transcurridos 80 minutos, el Real Madrid comprendió que el triunfo era cuestión de gol. Lo celebró Bale, pero lo cierto es que lo marcó Isaac Newton.

Ganar donde no lo consiguió el Barcelona y hacerlo emparedado entre una semifinal de Champions es una conquista de indudable mérito, pero la sensación es que el Real Madrid tardó demasiado en firmar lo que estaba escrito. La disculpa está servida y toca admitirla: cinco jugadores nuevos con respecto al último partido en Manchester, incluido Borja Mayoral, todavía de Erasmus.

Añadan la montaña rusa emocional que traslada a los madridistas de la Liga a Europa, con la misma presión pero con diferentes atmósferas. Únicamente el tiempo de San Sebastián es más cambiante: sólo faltó la espuma activa para jugar dentro de un lavado automático. Chorros desincrustadores, agua vaporizada, ozono abrillantador y sol para secar la colada.

Historia de un fracaso literario

Por Somos

Cuando Juanma me pidió un texto para la sección de invitados, no supe decirle que no (mecachís en la mar). Unos momentos después me dije… ¿Y ahora de qué leches escribo? ¿Fútbol, política, cine, religión o quizá le planto un par de recetas de cocina y me quedo tan ancho? Estaba más en blanco que los escaños de Rajoy cada vez que abre un juzgado.

Recurrí a la insistencia, después a la perseverancia y más tarde a la obstinación, pero todo es inútil cuando las ideas no surgen. Ni musas ni leches, que eso debe quedar para plumas enormes y no plumillas aficionados. A mi imaginación no la venían a visitar ni las compañías telefónicas, total para qué, ya estaba la pobre en una magnífica tarifa plana.

Así que puse la tele. Doce canales después, seguía en la más absoluta negación del escritor. Si no hubiese sido porque se me cayó el mando a distancia presento mi dimisión por email. Pero como el pobre quedó hecho cisco, enseñando las pilas como los accidentados los huesos y las actrices porno el tesoro, pase a darme cuenta de que ahora lo que se lleva son las deconstrucciones, y que si eso se puede hacer con una tortilla y ser candidato a estrella michelín, también sería posible hacerlo con la confección de una historia. Si salía bien, estupendo y si no, batido de letras al canto.

Sobran piedras para hacer el muro

Por Macacha Marín

Aunque todo depende de nuestra vara de medir: ¿Alguien me puede negar que jamás le persiguen sensaciones incómodas? ¿Alguien no ha querido atracar un banco? ¿Alguien no vive con el peso del beso que no ha dado? ¿Nadie se ha imaginado prostituyéndose? ¿Diciéndole a su jefe que se calle la “puta boca”? ¿Creándose una falsa identidad y largándose sin más? ¿Alguien vive sin ninguna paranoia?

Cuestión de Estado y cuestión de estrado

Lo aclaro antes de proseguir: no estoy haciendo una proclama a favor de la revolución (carezco de megáfono). Cuando pido que los políticos que fueron incapaces de llegar a un acuerdo de gobierno se larguen, no sugiero que se marchen a su casa o que se vayan a esparragar. Basta con que se hagan a un lado y dejen pasar al siguiente. Si alguien no sabe resolver un problema lo coherente es que lo intente otro. Sin dramatismos. Poco importa si el partido en cuestión elige como nuevo candidato al número dos, al tres o al 33. Que cada cual mueva su banquillo como desee.

Asumo que el escenario que planteo es irreal (de tan sensato), pero nos habría resuelto el problema. En el caso de que los candidatos hubieran sentido la amenaza del relevo habrían llegado a creativos acuerdos políticos. No lo duden ni un instante.

City-Madrid: no pasó nada, fantasmas al margen

Si esto fuera simplemente el combate de dos equipos en dos asaltos, el Real Madrid saldría ganador. Por fútbol colectivo y por talento individual. El empate en Manchester no debería resultar un problema en el Bernabéu en condiciones normales de temperatura y humedad. En el cálculo no incluyo el regreso de Cristiano o la recuperación de Benzema. Ambos ayudarían en la tarea, no hay duda, pero no son indispensables para que salgan las cuentas.

Sin embargo, esto no es sólo un combate entre dos equipos de fútbol. Hay algo que sobrevuela la eliminatoria, algo que no tiene relación con el juego, ni con el talento, ni con el pesaje objetivo de los contendientes. Ese algo es Pellegrini.

La caja de música

 Por Diego Alonso

A Hans Christian Andersen, inspiración lejana de esta historia.

Reencontré la caja de música bajo el montón de archivadores y papeles de la habitación, cubierta aún por el velo de polvo gris con el que se mezclaba el suave color de su porcelana. Hacía muchos años que la había dejado ahí, junto a la estantería, y en todo ese tiempo no me había preocupado por ella en absoluto, relegándola a un injusto olvido, tras tantos y tantos días obsequiándome con el armónico baile de sus figuritas y el candor agradable de sus notas. Probé a abrirla y descubrí, no sin cierta satisfacción, que todavía funcionaba. Sonreí mientras la cerraba. Al abrirla de nuevo reparé en las figuras: sumergidas en su propio y romántico vals, un joven soldado, de uniforme rojo, charreteras de bronce, cabello rubio y dos puntitos claros por pupilas en mitad de un rostro ligeramente azulado abrazaba por el talle a una joven que no parecía tener más de dieciséis o diecisiete años, con un vestido blanco de novia sobre el que se cruzaba, en la espalda, un lacito rosa. El cabello castaño le caía en bucles por la nuca y su cara, al igual que la del soldado, rezumaba alegría; un par de ojos negros y muy brillantes relucían por encima de la línea rosa tendida bajo la nariz que era su boca. En fin: una melancólica estampa de cualquier pareja de baile del siglo XIX.

Mucho Madrid y bastante Rayo

Sólo tienes una vida y de ti depende que sea ensalada de pollo o caca de pollo. Alguien lo dice en una película discreta que a mí me gustó. La frase es relevante por su descarnado realismo. Si aprovechas lo que la vida te ofrece, en el mejor de los casos, podrás ducharte con salsa César. Pero que quede claro: nunca serás un solomillo con patatas. Ahí radica el secreto de la existencia: en volar sin perder el contacto con el suelo, o con la lechuga.

La espera

Por Tomás Luis de Victoria

El tipo de pronto comenzó a correr y nadie se lo esperaba. No era de correr, independientemente de la situación en la que estuviese y había estado en muchas difíciles. Cuando la situación se complicaba, solía plantarse y solucionarlo todo cara a cara, como un hombre. Y parecía viéndolo de lejos que así iba a ser una vez más cuando, de pronto y sin darse cuenta, se vio rodeado de dos tipos bastante más fuertes que él, mas otro que se acercaba, pero en vez de entregarse, viendo el lugar donde estaba, en vez de alejar de sí el problema, comenzó a correr.

Zidane y la revolución proletaria

Zidane, el jugador más aristocrático que vieron los siglos, podría hacer historia como entrenador por haber promovido la revolución proletaria en el Real Madrid. Ya nadie pone en duda la titularidad de Casemiro, ni siquiera en Colombia. Bien, pues ya va siendo hora de que Lucas Vázquez merezca la misma confianza. Es una evidencia que el equipo mejora con él sobre el campo. Marcelino puede dar fe. Ahora sólo queda convencer a Bale o hacerle socio de Augusta.

Sobre cómo reírse pese a todo

Gene Kelly, optimista patológico.

Gene Kelly, optimista patológico. Incluso bajo la lluvia.

Mi cara no tiene un gesto intermedio entre la seriedad y la sonrisa. Lo que supone en problema. Muchas veces me preguntan si estoy enfadado o preocupado y se me hace raro explicar que mi cara no tiene un gesto intermedio entre la seriedad y la sonrisa. Podría practicar la media sonrisa, pero sería un gesto forzado. Si nadie me mira y nada me hace reír, yo estoy eminentemente serio. Y así me descubro cuando me sorprendo en algún espejo, sin tiempo de forzar una media sonrisa.

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